Política Forestal

31
Oct
2022

 

Reunidas las organizaciones representantes de los selvicultores de España y considerando:

1. Que el 67% de la superficie forestal española es propiedad privada y que sus propietarios son responsables de gestionar más de 19 millones de hectáreas en nuestro país.

2. Que la falta de rentabilidad afecta a muchas explotaciones forestales y consecuentemente pone en riesgo su pervivencia para el futuro.

3. Que no existen incentivos y apoyos suficientes a la actividad forestal, ni tampoco una fiscalidad adecuada.

4. Que los largos turnos de producción someten a las explotaciones a abundantes riesgos (catástrofes naturales, incendios, plagas)

5. El bajo valor catastral y de mercado de las tierras rústicas y la situación de despoblación rural.

6. La difícil aplicación de los reglamentos europeos a la diversidad forestal de nuestros territorios y a la compatibilización de usos.

7. La falta de integración de las políticas agrícolas, ganaderas, forestales y las políticas territoriales y ambientales.

8. La falta de un registro actualizado e integrado de todas las explotaciones agrarias con tierras agrícolas, ganaderas y forestales.

9. La falta de un modelo adecuado para las agrupaciones forestales.

10. La necesidad de reforzar el asociacionismo y el reconocimiento de los selvicultores y de sus organizaciones.

11. La necesidad de comunicar a la sociedad y a las nuevas generaciones la cultura forestal.

12. La necesidad de movilizar los recursos forestales e incrementar la actividad forestal para prevenir incendios e incrementar el papel de los espacios forestales en la lucha contra el cambio climático.

13. El indiscutible papel de los terrenos forestales y de sus propietarios en asuntos de carácter estratégico a nivel europeo como el pacto verde, la transición a la bioeconomía, la economía circular, la conservación de la biodiversidad, la lucha contra los incendios forestales, la soberanía energética y su transición a fuentes renovables.

Solicitamos al Gobierno de España:

1. Apoyo a la actividad forestal, como parte de la actividad agraria, que permita avanzar en su profesionalización, y una nueva Ley marco de Fomento de la Actividad Forestal, que promueva:

a. Una fiscalidad adaptada

b. Un marco de seguridad jurídico-económica.

c. Una contabilidad específica y adaptada, que cuantifique la provisión de servicios ecosistémicos.

d. Un nuevo modelo de sociedades con fiscalidad adecuada, que facilite la agrupación de explotaciones forestales, de manera sencilla, y que permita acceder al Registro de la Propiedad y actualizar el Catastro en áreas forestales.

e. Un nuevo marco de apoyos públicos al sector, que promueva el Contrato Territorial u otras figuras similares.

f. El fomento de líneas de crédito y de seguro específicas y adaptadas a las peculiaridades de la inversión forestal (largo plazo, amplios periodos de carencia, multifuncionalidad y riesgo)

g. Una simplificación y armonización de las normativas que afectan a la actividad forestal.

2. El reconocimiento del importante papel de los selvicultores en la provisión de servicios ecosistémicos, y en particular en la conservación, mantenimiento y mejora de la biodiversidad y el patrimonio natural, la adaptación al cambio climático y su mitigación, así como la provisión de agua, la regulación del ciclo hidrológico y las inundaciones y el control de la erosión y la desertificación. Y, por tanto:

a. Que la legislación básica forestal y de conservación de la naturaleza se simplifique e incentive la actividad selvícola en el manejo de los sistemas y ecosistemas forestales como herramienta imprescindible para la prevención de incendios y para la generalización de la gestión forestal sostenible.

b. Que se ponga en marcha una financiación pública adecuada de la actividad forestal activando el Fondo Forestal Nacional y que se habiliten mecanismos para la materialización de los pagos por servicios ambientales.

c. Que se ponga en marcha una comisión coparticipada entre las distintas Administraciones con competencias en el régimen de propiedad y los representantes de los propietarios forestales para esclarecer y depurar la titularidad de la propiedad forestal.

d. Que se articule un pacto nacional por los bosques que supere la visión y actuación cortoplacista y la óptica urbano centrista y que asegure la supervivencia y viabilidad económica de los montes.

3. Una campaña de comunicación relevante, de alcance nacional, que traslade a la sociedad la relevancia y el sentido de la gestión forestal sostenible, frene la pérdida de conocimiento y fomente la cultura forestal.

Solicitamos a la Junta de Castilla y León:

1. El reconocimiento de las organizaciones de propietarios forestales como agentes clave en el mantenimiento de un medio rural vivo y en la consecución de un paisaje rural resiliente incluyéndolos dentro de la Ley 13/2005, de 27 de diciembre, de medidas financieras de Castilla y León.

La creación de un censo de propietarios forestales, titulares de explotaciones, paralelo al de agricultores, sometidos a la normativa de representación profesional agraria.

2. Un pacto entre todos los partidos por el sector forestal, que lo sitúe en la agenda política.

3. La modificación de la Ley 1/2014, de 19 de marzo, Agraria de Castilla y León, para recuperar la integridad del concepto de lo agrario y reforzar los vínculos entre la actividad agrícola, la ganadera y la forestal en la Comunidad.

4. La puesta en marcha de una política de estructuras forestales, integrada en la de estructuras agrarias, orientada a diseñar el nuevo paisaje rural que se requiere, con discontinuidades y diversidad de usos, cubiertas y formaciones, que conduzca a:

a. La reordenación de las explotaciones forestales.

b. Un tamaño de explotaciones razonable.

c. La profesionalización y dinamización de la actividad forestal.

d. Completar el registro de explotaciones agrarias de Castilla y León, incorporando las forestales.

5. La puesta en marcha de una política de rentas forestales, que haga crecer la renta forestal, como parte de la renta agraria.

6. Un apoyo particular a la actividad ganadera extensiva, que considere la diversidad de las áreas agroforestales, por su valor para la prevención de incendios, y que atienda particularmente al mundo de la dehesa, a las zonas de media montaña, los puertos de montaña y la recuperación de la trashumancia

7. Una campaña de comunicación relevante, de alcance nacional, que traslade a la sociedad la relevancia y el sentido de la gestión forestal sostenible, frene la pérdida de conocimiento y fomente la cultura forestal, poniéndola en valor como seña de identidad autonómica de trayectoria secular.

8. Poner en valor la cultura forestal como seña de identidad autonómica de trayectoria secular, y crear un departamento de educación forestal para ayudar a mantenerla, extenderla e innovarla.

En Valladolid, a 19 de octubre de 2022 tras el I Congreso de la Propiedad Forestal

25
Oct
2022

 

o de la importancia de una política forestal más allá de la política

futuro. 2. adj. Que todavía no es pero va a ser.

Diccionario de la lengua española (Real Academia Española), 2021

Gabriel A. Gutiérrez Tejada

Presidente de la Asociación Forestal Andaluza

Giuseppe Aloisio

Director General de Política Forestal y Biodiversidad de la Junta de Andalucía

dehesa extremeña

El filósofo australiano Roman Krznaric, en su obra The Good Ancestor, reivindica el pensamiento a largo plazo -y su principal derivada, la planificación- frente a las actuales frustrantes tendencias cortoplacistas, proponiendo conectar el ritmo de vida de hoy con los largos ciclos propios de la Naturaleza. En definitiva, se trata de recobrar el espíritu de lo que este autor ha venido a llamar el “pensamiento catedral”: los maestros de obras medievales, conscientes de sus limitaciones personales y vitales, proyectaban la construcción de las catedrales apoyándose inevitablemente en la idea de que otra generación terminaría el trabajo comenzado por la suya. No había otra posibilidad, si se quería llevar a buen puerto aquella grandiosa labor.

El manejo del monte, su gestión sosegada, comparte esta cualidad de la construcción de las catedrales. La vida profesional de un gestor forestal apenas alcanzará para atisbar los resultados de su acción sobre el territorio. En el caso de los responsables políticos las limitaciones se agudizan, pues los plazos de legislatura son insignificantes frente a los tiempos de la evolución forestal. Es necesario, pues, un compromiso de acción conjunta entre todos los actores implicados en la línea del tiempo, por mandato social. El desafío moderno del gobierno del monte nos enfrenta a retos a muy largo plazo como el alivio de los efectos del cambio climático, o el riesgo permanente de menoscabo de la biodiversidad, entre otros, que exigen políticas de largo recorrido.

pinos silvestres

Pero a la planificación debe seguir, inexorablemente, la acción decidida y permanente. Sin esta, los proyectos se quedan en aspiraciones vanas. Sugería el Nobel Thomas Mann: “Pensad como hombres de acción. Actuad como hombres que piensan”. El pensamiento forestal debe construirse, como el pensamiento catedral, sustentado en firmes convicciones de perdurabilidad, sin miedo a la experimentación, basándose en los resultados de la investigación y la experiencia acumulada por la gestión histórica. Y debe dar a luz, a renglón seguido, a la acción forestal continuada, hija legítima y necesaria para la conquista de los objetivos perseguidos.

En 1975, comisionado por el Instituto para la Conservación de la Naturaleza, el ingeniero de montes Manuel Camarero Quirós, del Servicio Provincial de Cádiz, redactó el informe de valoración de las fincas que pasarían a conformar el monte de utilidad pública “Sierra de Líjar”, en el término de Algodonales. En su propuesta de forma futura de explotación, consignó “monte alto de pinsapos en mezcla con las frondosas actuales regeneradas”, por pertenecer al ámbito “del ecosistema del abeto pinsapo” donde solo resistía un único ejemplar de esta especie. Casi 50 años después, un equipo de la actual administración forestal andaluza se afana en la recuperación de aquella población ancestral de pinsapos, donde ahora medran por fin más de tres mil ejemplares de distintas edades, algunos produciendo semilla ya. En el futuro, nuevos ímpetus habrán de tomar necesariamente el relevo de este trabajo, en lo que será la culminación de la propuesta del señor Camarero, tal vez un siglo después. Un ejemplo nada más, entre muchos, de la necesidad de establecer una cadena de cooperación en el manejo del monte, que no admite bandazos ni en el espacio ni en el tiempo.

La política forestal en Andalucía, España o en el conjunto de Europa, debe mirar más allá de limitaciones legislativas, siempre finitas, y proyectarse hacia el futuro con espíritu perdurable, contribuyendo con su actividad al desarrollo inmediato de las comunidades rurales y al beneficio colateral del conjunto de la sociedad, conservando y mejorando los montes -andaluces, españoles, europeos- y su permanente y renovable potencial ecológico, económico y cultural.

Decía recientemente Nicolás de Benito Ontañón, otro ilustre forestal andaluz, al ser distinguido en Madrid por una trayectoria profesional de indudable servicio público, que “había trabajado durante más de cuarenta años para que la gente pudiera vivir del monte”. Serán necesarios otros cuarenta, y cuarenta más, para que su labor -la de todos, al cabo- se proyecte hacia el futuro del mismo modo que hubo esta de apoyarse en la de generaciones anteriores.

La ordenación de los usos humanos del territorio, muy especialmente en aquellas regiones de marcado carácter forestal como la andaluza, deben incorporar el manejo del monte y sus consecuencias en la médula de la acción política, considerada esta en su sentido más amplio. Para ello, deberá dotarse de los necesarios cuadros humanos -científicos, técnicos, prácticos y políticos- y presupuestos materiales suficientes -públicos y privados-, pues la obra es inmensa. Y contar con los habitantes del propio monte será, esta vez sí, la clave del éxito de una empresa titánica sin los cuales nacería muerta, una vez más. Propietarios, empresarios, trabajadores especializados y, en general, usufructuarios del monte deben ser los nuevos protagonistas del resurgir de la gestión forestal, auxiliados por una administración experimentada, solvente, dispuesta al servicio público, que desbroce el sendero burocrático y promueva las bases de un tejido empresarial forestal sólido y no obstaculice la consolidación de la necesaria industria forestal.

Otras industrias están redescubriendo las materias primas procedentes del monte. Madera, resina, corcho y otras cortezas, leñas, biomasa y un largo etcétera, se hacen indispensables en otros sectores como el de la construcción, la aeronáutica o la energía. Esta demanda constituye un nuevo motor de puesta en valor de nuestros mejores recursos naturales renovables. La selvicultura del siglo XXI no puede permanecer ajena a estos nuevos requerimientos de la sociedad del futuro. Así, las propias ciudades se constituirán en espacios neoforestales y las nuevas viviendas y otras construcciones basadas en soluciones naturales prolongarán, entre otras, la capacidad fijadora de los bosques vivos.

Para ello, ningún camino será más eficaz que el recorrido juntos: profesionales del sector y gestores políticos; pero, también, otros grupos de interés forestal como los ecologistas, además del resto de sectores para los que el monte puede y debe ser fuente de materia prima y energía. Organizados, como en las clásicas estructuras que hicieron posible la construcción de Notre Dame en París, il Duomo en Florencia o la Mezquita-catedral en Córdoba, calzando las botas de próximas generaciones y superando viejas rencillas y enconados debates estériles, emulemos a esos viejos maestros de obras y construyamos juntos, como gremio de gremios, los paisajes forestales del futuro, el monte de los que están por venir.

Osbo digital

27
Sep
2022

campo galego logo

Los pinos continúan casi duplicando los precios del año anterior, aunque su demanda se enfrió en los últimos meses. Mientras, el eucalipto registró una ligera subida de precios que se encaja en las oscilaciones habituales

La madera de pino y de eucalipto se ha mantenido en unos precios elevados en los últimos meses, notoriamente más marcados en el caso de las coníferas. En junio de este año el pino se situaba “en torno a los 45 – 55 euros / tonelada de media por lote, en pie en el monte y sin Iva, frente al intervalo de 25€ a 34€ que se registraba en septiembre del año anterior”, detallan desde la Fundación Arume, una entidad que agrupa a toda la cadena monte – industria ligada a las coníferas. La cuestión es durante cuánto tiempo se mantendrán estos niveles récord de cotizaciones.

En el eucalipto, los precios continúan estables, con una ligera subida que los sitúa “sobre unos 34 -35 euros de media, con corteza, en pie y sin IVA”, señala Xosé Covelo, director técnico de la Asociación Forestal de Galicia.

Mejora de precios de las coníferas

El pino venía de una década mala, pues tras la crisis del 2008 no inició la remontada hasta estos últimos años, cuando comenzaron a crecer las plantaciones, la demanda de madera y los precios. “Estamos en un momento en el sector primario en el que las materias primas están revalorizadas y demandadas, en especial la madera de pino en los últimos años” -resume Óscar Piñón, un maderista de Ortigueira-. “Formo parte de una empresa familiar, mi padre tiene más de 30 años de experiencia y yo más de 15, y en los 40 años que llevamos nunca se habían alcanzado estos precios”, destaca.

El precio por lote de pino llegó casi a duplicarse en el último año, llegando en junio a unos 45-55 euros de media, en pie sin Iva, según las estimaciones de la Fundación Arume. Si hablamos de madera puesta en fábrica, los precios se acercan a los 80 euros para la rolla. “Estos días estuvimos cortando dos plantaciones de pino y la rolla puesta en fábrica está en 75 euros y el puntal sobre 42 euros”, avanza Piñón.

 

tala de madera pino galicia

Tala de madera de pino.

Demanda de pino

Los buenos precios del pino aguantan por el momento porque la demanda continúa siendo elevada, según testimonian desde la Fundación Arume: “No tenemos la situación de escasez de madera de los últimos dos años, cuando había menos madera disponible para importar, y las empresas españolas tuvieron que refugiarse en el pino gallego, pero la demanda continúa elevada”, analizan.

“La demanda de estos meses fue brutal, especialmente por parte de los aserraderos, aunque ahora vemos como poco a poco se va frenando” -expresa Miguel Vázquez, de la empresa lucense Maderista Souto-. “Hoy estamos trabajando a un ritmo normal, pero tenemos la incertidumbre de si seguirá así para el futuro”, comenta.

Mucha de la demanda que hay en Galicia por parte de los aserraderos está ligada a la industria y al mercado del embalaje. “Nuestro mercado es principalmente el español, donde se sierran en torno a 5 millones de toneladas de madera de pino, de los cuales 2 millones se trabajan en Galicia. De este volumen, aproximadamente un 70% va para palés y embalajes, por lo que hace falta tener en cuenta este sector en la subida o en la bajada de la demanda de coníferas” -detallan desde la Fundación Arume-. “Hasta el momento tuvo mucha salida, pero desde junio hacia aquí se percibe un cierto arrefriamento de la demanda”, advierten.

En otros sectores, como el del triturado de pino para tablero, los maderistas señalan que continúa la buena demanda: “Se mantienen los precios e incluso aumentó la solicitud sobre este tipo de madera”, destaca Luis Díaz, de Forestal Díaz Casariego, una empresa forestal de la Mariña lucense.

Factores externos

A pesar del buen momento del mercado, el sector espera con desconfianza el otoño. “Hay factores a tener en cuenta, como la amenaza de un posible empeoramiento económico en otoño, o la entrada en el mercado de los pinos que ardieron en los incendios de los pasados meses”, analiza Xosé Covelo, de la Asociación Forestal de Galicia.

“La madera quemada de coníferas tiene un plazo para ser cortada y serrada sin que pierda sus propiedades. En los pasados meses ardió mucho pino que próximamente llegará a la industria”, añade Miguel Vázquez, de empresa Maderista Souto.

Esta llegada de madera afectada por los fuegos a las fábricas “incrementará la disponibilidad de pino en el mercado, lo que probablemente generará una bajada de precios por exceso puntual de oferta. De este modo, el puntal, que había conseguido buenos precios en este año, puede que baje en torno a 4 euros aproximadamente”, valora Covelo, que recuerda descensos similares tras otras campañas con importantes incendios forestales.

Situación en el punto de venta

El mercado final es otro de los escenarios a los que prestar atención, pues la subida de precios que experimentó la madera y un cierto temor al otoño que se avecina son factores que le afectan al consumidor.

“A partir de abril, el primer canal en notarlo fue el del bricolaje, por estar más cerca del consumidor final. Una gran empresa comercializadora del sector tuvo una bajada de ventas en los productos de madera que se aproxima al 30% con respecto al mismo mes del año anterior. Así las cosas, los productos transformados de madera se van a ir perfilando hacia abajo, y eso quizás repercuta en la materia prima”, valoran en la Fundación Arume.

En cualquier caso, desde el sector inciden en que estos cambios se ciñen al corto plazo, pues “es evidente que tenemos una alta demanda real de pino por parte de las industrias, que están aumentando el valor añadido que le dan la esta materia prima y que van a seguir necesitando un elevado suministro de coníferas a largo plazo”, subraya Covelo.

Los altos precios de la pasta de papel sostienen el buen momento del eucalipto

Los precios de la pasta de papel se han mantenido en una tendencia ascendente en los últimos meses, registrando a inicios del verano un 38% de aumento en comparación con mayo del 2021. Eso derivó en que el paquete de folios en las papelerías haya subido alrededor de un 40% en relación a hace un año. ¿Pero en qué medida repercuten estos incrementos en la materia prima?.

Las pasteras tienen unas primas en sus tarifas ligadas a la cotización de la pasta de papel, pero son primas que no suelen implicar cambios sustanciales. “Sí que hubo un ligero aumento de precios a pie de monte, pero nada extraordinario, son las fluctuaciones habituales”, valora Manuel Freire, un maderista del Morrazo que trabaja principalmente con eucalipto.

Sobre el precio del eucalipto, Freire recuerda que la principal firma del sector, Ence trabaja con unos precios base a los que añade complementos por cuestiones como tamaño del lote, certificación o precios de la pasta de papel. “Este año añadió una prima a mayores para ayudar a paliar los costes por el alza de los combustibles, siendo una de las cuestiones que repercutió, en cierto modo, en el mantenimiento de los precios del eucalipto”, expresa Manuel Freire.

“El precio medio de la madera de eucalipto globulus a pie de monte y sin Iva es actualmente de unos 34€ o 35€”, concreta Covelo. Un dato que confirman los madereros consultados. “El precio máximo en estos momentos está por los 34 € más Iva con corteza, y unos 6€ más pelada”, señala Luis Díaz, en tanto Freire apunta un arco de precios de 30 – 35 euros, dependiendo de factores como el tamaño del lote o las características del terreno.

El buen momento de precios de la pasta de papel mantiene también una alta demanda de madera por parte de la industria. Incluso en Ence Pontevedra, donde la factoría tuvo que cerrar temporalmente por la escasez de agua en el Lérez. “Por el momento siguen demandando madera, no pusieron ningún cupo. La única cuestión es que están desviando la madera del norte de Galicia para Navia por la necesidad del momento”, explica Manuel Freire.

En cuanto al envío de madera para las pasteras portuguesas, los maderistas apuntan también a una alta demanda y a una reducción de requisitos. “Están demandando madera de eucalipto incluso con corteza, una cuestión que años atrás apenas se contemplaba”, señala Óscar Piñón.

Campo Galego

12
Oct
2022

Os presentamos el sumario y revista completa on-line del número extraordinario (nº 150) que ha editado la revista Montes con motivo del 50 aniversario de la primera sesión del Comité Forestal de la FAO.

Se trata de un compendio de artículos sobre las experiencias y trabajos realizados por diferentes ingenieros de montes que han colaborado con la FAO en algún momento de su carrera profesional, en el extranjero, hilvanados a través de secciones como editorial, entrevista y artículos divulgativos, así como de unas páginas de “Decíamos ayer” sobre el VI Congreso Forestal Mundial, celebrado en Madrid en 1966.

No te pierdas esta visión sobre la contribución de los ingenieros de montes a una gran cooperación internacional adelantada a la globalización.

Leer GRATIS el número completo

Fuente: Colegio Oficial de Ingenieros de Montes - COIM

26
Sep
2022

pinos silvestres

Menos bla, bla, bla y más VA, VA, ¡VA!

En la nueva Estrategia forestal de la UE para 2030 se expresa el papel fundamental de los bosques para lograr reducir un 55% la emisión de gases de efecto invernadero antes de 2030 y lograr la neutralidad climática en 2050. Destaca el papel fundamental de la silvicultura para el desarrollo de prácticas de gestión forestal sostenible, y fomenta la utilización eficaz de la madera y el aprovechamiento de los recursos forestales.

https://ec.europa.eu/commission/presscorner/detail/es/IP_21_3723

El Acuerdo de diálogo social “El sector forestal, oportunidad para la generación de actividad económica y el empleo en el medio rural: 2015-2022” firmado en febrero de 2018 por la Junta de Castilla y León tiene como objetivo general promover el uso de los recursos forestales como sector clave de la Comunidad Autónoma para impulsar la actividad económica, generar empleo y fomentar el desarrollo económico y social del medio rural. https://www.cescyl.es/es/publicaciones/informes-iniciativa-propia/sector-forestal-castilla-leon

Pero pasan los años y todo se queda en un bla, bla, bla…

Por eso, ante el menosprecio al valor forestal de nuestra región y ante la discriminación política que, a la hora de legislar, sistemáticamente sufre el sector forestal por parte de los gobiernos de la Junta de Castilla y León, nace ForesCyL.

Una plataforma impulsada por los principales actores de la cadena de valor del sector forestal en Castilla y León (más de 700.000 propietarios forestales | +2.600 empresas | + 12.600 empleos) que, representados por la MIMCYL – Mesa Intersectorial de la Madera de Castilla y León, surge con el objetivo de empoderar al sector forestal en nuestra comunidad, y favorecer su desarrollo integral, hasta posicionarlo como el sector estratégico que es.

Desde el sector decimos: VA, VA, ¡VA!

Con este MANIFIESTO queremos hacernos oír y expresar nuestras reivindicaciones. Apelar a la implicación de la sociedad y a su complicidad para revertir el rumbo errático e ineficaz de las políticas forestales en Castilla y León.

Nos unimos para hacernos fuertes, impulsarnos y aprovechar el gran valor que atesora nuestro territorio. Y así poder poner a funcionar un sector clave para mejorar la vida de las personas de Castilla y León.

Vamos a hablar claro, nos jugamos mucho y necesitamos alguien al otro lado

ES URGENTE la creación de un foro estable de diálogo para trasladar las necesidades del sector y hacer más eficientes las políticas públicas en materia forestal.

NECESITAMOS poder avanzar sin obstáculos mejorando la eficiencia de la estructura administrativa, relacionada con las producciones forestales.

EXIGIMOS aunar en un único organismo las competencias del sector forestal, hoy dispersas en varias consejerías.

La Consejería de Agricultura, hasta hace poco responsable de las competencias de la industria de primera transformación, ha marginado de forma escandalosa a todo el sector industrial forestal (en acceso a ayudas, en apoyo a los productos, en promoción, en apoyo a la formación, en I+d, en digitalización… etc). Tras las elecciones las competencias en esta materia han sido trasladadas a la Consejería de Medio Ambiente, Vivienda y Ordenación del territorio. La Consejería de Empleo e Industria está muy lejos de las industrias de segunda transformación y en especial de la industria del mueble que sigue padeciendo una enorme sangría.

QUEREMOS diseñar juntos políticas eficaces que aprovechen el gran valor forestal de CyL.

Vamos a luchar por los derechos de todo el sector

PEDIMOS un pacto entre todos los partidos por el sector forestal, que lo sitúe en la agenda política en la próxima legislatura y lo mantenga, CON CARÁCTER ESTRATÉGICO durante más de un mandato.

QUEREMOS una aplicación de los fondos PDR con una cuota más equilibrada. El apoyo a la propiedad privada es insignificante y el papel de la Junta de Castilla y León en la política forestal se reduce prácticamente a la gestión de los montes públicos. Un dato, la inversión sobre los 2.1 MHa forestales en manos privadas es de 20 M€, frente a los 1.000 M€ anuales que se destinan a los 3,4 MHa agrícolas, es decir, 9,5 €/ha privada forestal frente a los 294 €/ha agrícola.

EXIGIMOS que se corrija la discriminación del sector forestal-madera. La normativa autonómica se refiere a lo agrario exclusivamente como “la agricultura y la ganadería”; La ley nacional incluye también “lo forestal”. Entendemos que en Castilla y León esta diferencia margina inaceptablemente al sector forestal-madera.

Vamos a construir futuro

El cambio climático nos afecta a todos. El impacto potencial es enorme, con predicciones de falta de agua potable, grandes cambios en las condiciones para la producción de alimentos y un aumento en los índices de mortalidad debido a inundaciones, tormentas, sequías y olas de calor. La gestión sostenible de los bosques es una de las soluciones más rentables e inmediatas para frenar el cambio climático, ya que los árboles eliminan grandes cantidades de carbono de la atmósfera a medida que crecen.

Pero los bosques no se cuidan solos y necesitamos tu ayuda para que la JCyL apoye a los propietarios privados en las labores de gestión, conservación y mejora de los bosques de los que disfrutamos TODOS. Firma el manifiesto

Castilla y León cuenta con la mayor superficie forestal certificada de España, con casi 727.400 hectáreas de bosques , que representan casi el 33% del total nacional. Asimismo, Castilla y León es puntera en la producción de biocombustibles sólidos, como pellets (250.000 toneladas al año) y astillas (300.000 toneladas). En este contexto, la Junta de Castilla y León aprobó en 2011 el Plan Regional de Ámbito Sectorial de la Bioenergía que se retroalimenta a su vez con el Programa de Movilización de Recursos Forestales, diseñado para consolidar el empleo forestal profesionalizado, incrementar la producción de los recursos forestales y mejorar la calidad de los hábitats regionales, y la Estrategia de Eficiencia Energética de Castilla y León 2020, cuyo objetivo es conseguir mejorar la eficiencia energética en el uso y consumo de la energía, apostando por la biomasa como energía renovable.

Tenemos los recursos y los planes ¿Qué nos impide ponerlos en marcha? Si tú también piensas que es hora de pasar a la acción. Firma el manifiesto

El desarrollo económico y del tejido productivo de las áreas rurales son esenciales para combatir el despoblamiento. El 46% de la industria de la madera se ubica en localidades rurales de menos de 2.000 habitantes frente al 26% situada en localidades de más de 10.000 habitantes, lo que demuestra el carácter marcadamente rural de esta actividad y su importancia en el desarrollo económico, en la generación de empleo y en la fijación de población en las áreas rurales, especialmente en las más pequeñas.

Somos una región con un gran potencial pero nos tienen que dejar desarrollarlo. Si te gusta vivir en tu pueblo. Firma el manifiesto

De acuerdo con el Global Entrepreneurship Monitor de 2019, el índice de emprendimiento de Castilla y León se sitúa en el 7,7. Este resultado supone un incremento del 37,5% desde 2008, lo que posiciona a Castilla y León, junto con Cataluña, como las dos únicas comunidades autónomas que han visto incrementado su índice en este periodo. Sin embargo, Castilla y León se encuentra por debajo de la media española en empresas innovadoras. Una mejora en este aspecto pasará por el fomento de las colaboraciones público-privadas a escala sectorial que faciliten el trasvase de conocimiento a las empresas más pequeñas, mejorando sus procesos productivos y de comercialización y, por ende, su competitividad.

Si tú también crees que el sector forestar se merece recibir las mismas inversiones que otros sectores. Firma el manifiesto

Para adherirse al manifiesto pincha aquí

https://forescyl.es/manifiesto-del-sector-forestal-de-castilla-y-leon/

© 2018 Distrito Forestal.